Moncloa presiona a las televisiones privadas para censurar las pitadas a Sánchez
Ante el desfile del 12 de octubre, Presidencia recrudece los mensajes para no dar las pitadas o minimizarlas
En Getafe, Moncloa ocultó a la prensa un supuesto “paseo triunfal” de Sánchez por la ciudad del que no hay ni un vídeo
Moncloa presiona a las televisiones privadas para censurar las pitadas a Pedro Sánchez. OKDIARIO ha podido comprobar que la Presidencia del Gobierno ha recrudecido desde el verano los mensajes a periodistas y medios, particularmente televisiones privadas, pero también medios digitales, para que eviten dar o minimicen al máximo los abucheos que recibe el presidente del Gobierno cada vez que sale a la calle.
“Las mayores presiones que recibimos de Moncloa es para no dar las pitadas al presidente”. Este testimonio, procedente de una televisión privada nacional, coincide con otros recogidos en el ámbito de las redacciones. Desde otra televisión nacional señalan que “los abucheos les preocupa mucho [a Moncloa], casi lo que más ahora mismo. Nos sugieren que no los emitamos o que les dediquemos apenas unos segundos”. “De la redacción para arriba, esas ‘sugerencias’ también existen”, nos dicen. Los tentáculos de Moncloa usan, en ocasiones, el argumento de “la ultraderecha”: “Vienen a decir que son protestas orquestadas por Vox y que darles voz es dar voz a la ultraderecha”.
12 de octubre
Este miércoles es el desfile del 12 de octubre. Desde que es presidente, Sánchez no ha podido evitar los gritos de protesta y las peticiones de dimisión o elecciones. Ni que las televisiones los ofrezcan, pese a las presiones.
El año pasado, con la connivencia audiovisual de TVE, que ofrece la señal oficial, Sánchez usó el truco de retardar su llegada y hacerla coincidir con la de los Reyes para ahogar los pitidos contra él y confundirlos con los aplausos a Don Felipe y Doña Letizia.
Fuentes de RTVE reconocen que en la televisión pública nacional hay “instrucciones discretas” de “minimizar” los abucheos. El desfile del miércoles va a ser la primera prueba de fuego para la nueva presidenta plenipotenciaria (por Real Decreto) de la corporación, la socialista Elena Sánchez, colocada por PSOE y Podemos “a modo de comisario político de cara a las elecciones”, dicen fuentes de la corporación. Las mismas fuentes no descartan que “ante el obsceno espectáculo del acoso a Tornero y el nombramiento de Elena Sánchez, TVE se lave la cara ofreciendo en los Telediarios las pitadas, si las hay, pero de forma contenida”.
En TVE recuerdan que “en el directo, las pitadas pueden quedar diluidas, según la imagen que ofrezca la realización, con el sonido en segundo plano y los presentadores hablando en primer plano. Dirán que no las han ocultado, pero quedarán matizadas y más si Sánchez vuelve a pegarse al Rey como el año pasado”.
‘Sánchez con la gente’
La campaña de ‘Sánchez con la gente’, iniciada en septiembre, ha sido un fracaso a modo de boomerang, que ha obligado a Moncloa y a Ferraz a volver a esconderle o encerrarlo, otra vez, en actos de partido. Empezó en el propio recinto de La Moncloa con un casting de ‘ciudadanos’ entre los que había cargos del PSOE y hasta ex escoltas del presidente. Las preguntas fueron limitadas, la mayoría de ‘ciudadanos’ se quedó sin formular ninguna y -al igual que en sus comparecencias de la pandemia- el presidente las conocía de antemano.
Al del Palacio de La Moncloa, siguió un acto en Sevilla donde Sánchez recibió lo que recibe cada vez que se asoma a un lugar público: abucheos y pitadas. “¡Que te vote Txapote!”, persiguió un señor al presidente con su pancarta casera. La frase y la pancarta se hicieron virales. “¿Dónde están tus socios terroristas?”, le gritaron antes del Covid, entre abucheos generales, en el Wanda Metropolitano.
Hace unos días, en Getafe, Moncloa decidió ocultar a los periodistas el supuesto ‘paseo’ de Sánchez por la ciudad antes de dar un mitin -cerrado- con Sara Hernández y Juan Lobato. La alcaldesa lo calificó después de “paseo triunfal”, pero lo cierto es que, por más que uno busque en Internet, en esta era de los móviles donde cualquiera lo graba todo en la calle, es difícil encontrar un solo vídeo de tan “triunfal” paseo. De hecho, ni en las cuentas de redes de Sara Hernández o en las de Juan Lobato hay imágenes del supuesto “paseo triunfal”. Apenas, unas pocas fotos de Sánchez en un mercadillo de las asociaciones de discapacidad de Getafe, para nada concurrido en ese momento.
Impopular
La impopularidad de Sánchez en la calle no es nueva. Viene ya de la moción de censura apoyada por sus socios separatistas, aunque ha empeorado exponencialmente desde el final del confinamiento por el Covid y, sobre todo, en estos meses de crisis e inflación.
Un simple y ligero repaso a las protestas (a sólo algunas) contra el presidente del Gobierno de ciudadanos o trabajadores de sectores diferentes, nos lleva a… tomen nota: Sevilla, Málaga, Toledo, Ciudad Real, Murcia, Trujillo, Cáceres, Matalascañas, Valencia, Barcelona, Logroño, Lanzarote, Ceuta, Don Benito, Guadalajara, Palencia, La Coruña, Alcalá de Henares o Salamanca… Y no están todas.
Visto que las grandes ciudades se han convertido en ‘territorio comanche’ para el presidente, Moncloa ha buscado en los últimos tiempos pueblos más pequeños. Pero ni por esas. Después de una pitada en la plaza mayor de Salamanca, Moncloa se llevó a Sánchez a comer a Calvarrasa de Arriba, población de 600 habitantes, a 10 kilómetros de la capital. Pero ni por esas. Un ciudadano se acercó al presidente y le preguntó: “¿Eres Pedro Sánchez?”. A lo que su ego complacido contestó sonriente: “Sí. Soy yo”. El ciudadano en cuestión, con rapidez, le espetó: “¡Sánchez el mentiroso… Enhorabuena hombre!”. El ego caído del presidente fue indisimulable en ese instante. Su cara se tensó y un guardaespaldas se interpuso.
Tampoco tuvo suerte el presidente visitando los pueblos zamoranos de la Sierra de la Culebra, arrasada este verano por el fuego. Un campesino, ya mayor, se acercó a Sánchez y le dijo: “Ya hemos perdido la sierra de la Culebra y ahora te queda la de la Demanda ¡Ve y quémala!”. Sánchez le contestó: “La arreglaremos”. Al campesino le salió del alma la respuesta: “¿Arreglarlo? ¿Tú arreglarlo? ¡Tú que vas a arreglar!”. El vídeo se viralizó. El ego de Sánchez, nuevamente, quedó tocado.
El Falcon
El uso abusivo del Falcon también le ha costado al presidente críticas y protestas. Cuando este verano viajó a Casas de Miravete (Cáceres) movilizando el Falcon y el Super Puma para desplazarse a 200 kilómetros de Madrid y enviando una enorme caravana de coches desde la capital por otra parte, los habitantes de aquella zona arrasada por el fuego le recibieron también con gritos y abucheos, que hicieron extensivos al presidente autonómico, Guillermo Fernández Vara. Sánchez posó después ante las cenizas de los campos quemados y una foto de la agencia Efe se hizo polémica y viral por lo que mostraba su pantalón.
Ese viaje y todos los del Falcon han ido quedando sistemáticamente registrados en una cuenta particular de Twitter: @ciclbh. Twitter ha suprimido de un plumazo este fin de semana tres meses de información de esa cuenta privada sin dar ninguna explicación y sin previo aviso. Los viajes de Irene Montero a Nueva York en Falcon, los del resto de ministros y los del presidente han desaparecido.
El autor de la cuenta ha escrito: “Censurado por Twitter por orden del Gobierno por fiscalizar el despilfarro de nuestro dinero que el Gobierno sanchista-comunista del Falcon quiere ocultar”. Es la cuenta que ha venido denunciando sistemáticamente los movimientos del Falcon para desplazamientos cortos de Sánchez, con el avión vacío o lleno, o para viajes supuestamente oficiales que coincidían en el destino con mítines del PSOE.
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